Bien, ¡este proyecto se está haciendo realidad! Mi entrada de hoy trata de algo ENORME: las fases de planificación para convertir un transbordador Ro Pax en un buque hospital. En serio, ¡qué guay! Suena como algo sacado de una película, pero está sucediendo de verdad, y ser incluso una pequeña parte de la planificación inicial es increíblemente inspirador.
Pensar en tomar algo construido para transportar coches y personas y transformarlo en un centro médico flotante... es una empresa enorme, obviamente. Hay un millón de cosas a considerar. ¿Dónde van los quirófanos? ¿Cómo se crean entornos estériles en un barco? ¿Qué pasa con el suministro de energía y agua a tal escala? Es un rompecabezas de mil piezas.
Pero, sinceramente, también es increíblemente motivador. Imaginar que este ferry, por el que probablemente han pasado innumerables turistas y camioneros, cobra una nueva vida dedicada a curar y ayudar a los necesitados... es algo muy poderoso. Da la sensación de que formamos parte de algo que realmente puede cambiar el mundo. Es un recordatorio de que incluso los retos más complejos pueden abordarse con mucha planificación, ingenio y mucho corazón. Estoy muy ilusionado con lo que está por venir.